Clem Burke, baterista de Blondie, pide que se desarrollen estudios de percusión para infancias con autismo


En el marco de un proyecto de investigación, Clem Burke ha afirmado que la percusión ayuda a aliviar los trastornos autistas y debería incorporarse a los programas escolares.


El baterista del grupo estadounidense Blondie, Clem Burke, pidió el miércoles que se introduzca la batería en los planes de estudio de las escuelas británicas para ayudar a los niños autistas.

De acuerdo con un estudio realizado en el marco del Clem Burke Drumming Project, los niños autistas que aprenden a tocar la batería son más capaces de controlar sus emociones y muestran menos signos de hiperactividad, falta de atención y comportamiento repetitivo.

Este estudio es el primero de este tipo que demuestra cómo responde el cerebro a la percusión y cómo puede ayudar a los niños con autismo y otras dificultades sociales y emocionales, declaró Burke a la Royal Society en la exposición científica de verano de Londres.

“Dada la presión a la que están sometidas actualmente las escuelas para hacer frente al fuerte aumento del número de niños con problemas sociales y emocionales y dificultades de aprendizaje, añadir breves sesiones de percusión al plan de estudios podría cambiar las reglas del juego con un coste y un esfuerzo mínimos”, añadió el músico.

Pruebas prometedoras

Hay más de 166,000 niños con autismo en las escuelas británicas, una cifra que ha aumentado un 8% desde 2020, según el Departamento de Educación.

Alrededor del 70% se educa en escuelas ordinarias, pero un informe de la Sociedad Nacional de Autismo mostró recientemente que para tres cuartas partes de los padres, las escuelas no satisfacen plenamente las necesidades de estos niños.

Como parte del estudio destacado por Clem Burke, publicado el año pasado en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences, se impartieron dos clases de batería de 45 minutos cada semana durante dos meses a jóvenes de entre 16 y 20 años.

Los resultados mostraron que los que progresaban en el dominio de la batería veían mejorar su estado. Las resonancias magnéticas revelaron cambios en la función cerebral.

El estudio concluyó que “tocar la batería no sólo reduce la hiperactividad y la falta de atención en adolescentes con autismo, sino que también mejora la conectividad funcional en regiones cerebrales responsables del control de la inhibición y la supervisión del resultado de la acción”.

El Clem Burke Drumming Project, que explora los beneficios de tocar la batería para la salud física y mental, fue creado en 2008 por el batería y dos investigadores de universidades británicas.

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