Los NFTs de la semana del arte
Aunque agradecemos estos momentos de calma después de la locura que fue la semana del 8 al 13 de febrero, extrañamos los escenarios que acompañaron a la ciudad; llenos de color, arte, críticas sociales, música, moda y mucho ambiente. Esta edición nos sorprendió con proyectos nuevos, propuestas diferentes y artistas que están revolucionando la escena.
Cada una de las ferias, salones abiertos y exposiciones de la CDMX muestran cosas diferentes de la escena, mientras Zona Maco luce por toda la ciudad a los grandes artistas como: Damien Hirst, Andy Warhol, Takashi Murakami o Rachel Feinstein, ferias como Salón ACME crea espacios para proyectos independientes o artistas experimentales.
Pero está claro que no hay escapatoria de la nueva tendencia que está acaparando el mercado: Los NFTs.
Del acrónimo, non fungible tokens, estos activos digitales han dominado los medios de comunicación desde una específica subastas en 2021. Donde el artista Mike Winkelmann, mejor conocido como Beeple, vendió a $69,346,250 dólares americanos su pieza tokenizada llamada Everydays: the 5000 first days. Esta subasta se convirtió en un punto histórico para la comunidad dedicada al criptoarte. Desde este punto, más artistas, celebridades, compañías y museos se han unido a la blockchain y han explorado sus posibilidades
¿De dónde viene este trend?
Del mismo lugar detuvo todas las públicas, la cuarentena causada por la pandemia del virus Covid-19. Sin la oportunidad de crear arte en lo físico, artistas regresaron a las computadoras para crear, pero necesitaban la seguridad de que su trabaja no fuera robado o duplicado sin su permiso. En un principio la tecnología de la blockchain ha sido utilizada para mantener los archivos digitales seguros, para darle una legitimidad a las transacciones que ya ocurrían en la Web, solo fue un paso que para mucho parece obvio:
Los NFTs existen para que los artistas digitales puedan mantener el crédito por sus obras y más ganancias merecidas por sus piezas. Claro que como todo producto, los motivos se van deformando.
La misma pandemia afectó la organización de estas ferias en los últimos dos años. Los stands se digitalizaron, las piezas se mintearón, los archivos se digitalizaron y los museos se transportaron a modelos 3D. Fue de gran ayuda para esta época de crisis, pero nos dejó un hoyo del tamaño similar al centro citibanamex en nuestro corazón. 2022 fue el primer año pospandemia para retomar las actividades del círculo artístico, y no decepciono.
Tanto Zona Maco, como Salón ACME contaban con una sección destinada para el arte digital y los NFTs. Lugares como CAM Galería o Strata Gallery exponen las posibilidades de la nueva ola estética. En lugar de montar cuadros o esculturas, estos booths trabajan con pantallas y computadoras. CAM Galería trata de sacar el NFT de la estática pantalla con su performance NFT Wheels dónde un intérprete jalaba un pequeño carro rodeado de pantallas con un NFT de Pedro Friedeberg.
No hay duda que hay una revolución en camino. La reciente digitalización del mundo nos promete un mejor futuro, su atractivo principal recae en el escapismo de la realidad. Parece una fantasía creada por los magnates del mercado, pero los NFTs son una realidad planteada por artistas y geeks. Para Juan Canela, el director artístico de la feria, la inclusión de NFTS era esencial:
“Como feria de arte contemporáneo es muy difícil no estar interesado en eso que está pasando en este sentido”
En el booth de Strata fue un paso adelante y experimentó con el arte en la realidad virtual. Además de las pantallas en su pared y las computadoras en sus mesas, el arte salta de la fiscalidad a lo etéreo que solo existe dentro de tu teléfono, es otra manera de consumir arte, y darle sentido a las herramientas tecnológicas que tenemos.
Puede que algunos asistentes no hayan tomado mucha importancia a la inclusión de los NFTs, pero para la comunidad cripto esto parece ser una gran oportunidad para el medio. Demuestra el poder y momentum que los activos digitales tienen en el mundo del arte y nos hacen dudar del futuro próximo:
¿Habrá más coleccionistas tradicionales que se conviertan en coleccionistas de NFTs? ¿Qué significa para los artistas que todavía producen en lo físico?
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