Nancy Cárdenas, la escritora lesbiana que no puedes dejar de leer

Columna por: Celeste Espinosa

“Nancy hizo de todo, desde teatro, novela, ensayo y por supuesto poesía, entre sus muchas facetas, también incursionó en la actuación y en el activismo a favor de los derechos de la comunidad LGBTTTIQ+”.


La literatura LGBTTTIQ+ en México ha pasado por muchos momentos memorables, basta con recordar a Salvador Novo o a Luis Zapata, sin embargo, es innegable hacer la observación de la manera en que, incluso dentro del movimiento, los focos siempre se dirigen en mayor medida a los varones gay, por supuesto la literatura no es la excepción, pues al hablar de los aportes de la comunidad LGBTTTIQ+ siempre saltarán primero los nombres masculinos, es por eso que en esa ocasión quiero recomendar a una poeta lesbiana que me parece imprescindible para este Pride.

Nancy Cárdenas, es quizás una de las escritoras lesbianas más conocidas en México, nacida en Parras, Coahuila, Nancy hizo de todo, desde teatro, novela, ensayo y por supuesto poesía, entre sus muchas facetas, también incursionó en la actuación y en el activismo a favor de los derechos de la comunidad LGBTTTIQ+.

Nancy fue la primera mujer en declararse abiertamente lesbiana y lo hizo en televisión nacional, en una entrevista realizada por Jacobo Zabludovsky y con ello lanzo un claro mensaje, no sólo de orgullo, sino también de fortaleza, pues Nancy decidió salir del clóset públicamente en 1973, cuando la homosexualidad aún era considerada una especie de enfermedad mental.

Nancy Cárdenas demostró ser una mujer que no llevaba el activismo sólo como una teoría dentro de los círculos intelectuales, sino que estaba dispuesta a defenderla con todo lo que conllevara. Este aspecto de su carácter se ve reflejado en el siguiente poema: 

Entre tantas liberacionistas que conozco
sólo tú
-de apariencia tan frágil-
has querido llevar a la cama
esos principios básicos de la teoría.

Nancy nunca escatimó en esfuerzos por conseguir derechos para la comunidad homosexual, demostrándolo también al cofundar el Frente de Liberación Homosexual (FLH), es decir, la primera organización homosexual con tintes políticos y lo que comenzó con marchas para exigir los permisos de puesta en escena para obras de teatro con temáticas gay, terminó en la primera Marcha del Orgullo, en 1978.

En el intermedio, Nancy Cárdenas, Carlos Monsiváis y Luis Gonzalez de Alba promovieron el primer manifiesto de defensa de los homosexuales denominado Contra la práctica del ciudadano como Botín Policiaco, en el cuál se exigía un alto a la represión policiaca en contra de los y las homosexuales, denunciando así también la crueldad y falta de respeto hacía los derechos humanos, además indicaba: 

En México, la homosexualidad no constituye delito cuando se da en privado y entre adultos consensuales. De ahí se deriva que es posible acusar a una persona de violación o corrupción, mas no de ser homosexual, como no se le puede “acusar” de ser rubio, alto, zurdo o guapo, condiciones tal vez menos frecuentes que la de homosexual.

Nancy continuó con su labor como activista incluso contra causas como el VIH, el cuál era cotidianamente referido como un problema que se presentaba únicamente en la comunidad homosexual, por lo que Nancy dirigió y montó la obra Sida…así es la vida, de William Hoffmann en 1988, siendo la primera obra en México que abordaba el tema no desde la moralina usual de la época y con la que la sociedad y el gobierno se lavaron las manos para emprender acciones de contención ante la emergencia de salud, sino como un problema de salud pública.

Aunado a ello, Nancy Cárdenas nunca dejó de escribir poesía y teatro, desde los cuáles también cuestionó las estructuras sociales y abordó abiertamente su orientación sexual:

a) YA HEMOS VIVIDO EL ESTRUJANTE DRAMA DEL MODELO MONOGÁMICO
que estalla ante la poligámica realidad histórica
de la propia vida en ambas dos posiciones.
b) La pareja abierta es divertidísima
en tanto no quieras pareja
c) ¿Y la fidelidad responsable mientras nos nazca del cuerpo?

SI HABITAMOS EN EL DISTRITO FEDERAL,
las pueblerinas románticas tenemos que resignarnos:
la vida no transcurre junto junto a un estanque,
sino a un costado del Periférico.
Allí, Muñeca del Asfalto,
-bajo la lluvia-
decidiste que esa noche dormirías conmigo

AHORA COMPRENDO QUE, DESDE EL PUNTO DE VISTA DE TU MAMÁ,
yo no resulto un buen partido:
me exhibo como militante gay,
me comporto como anarquista de izquierda
y vivo la azarosa vida doméstica del artista independiente.
Peor que si fuera iletrada, tonta y pegalona

NO SÉ QUÉ TIENEN
las diferencias ideológicas
que enfrían los besos, aligeran los abrazos
y finalmente acedan el aire que respiran los amantes.

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