Dos trabajadores resultan heridos después de ataques en el MoMA
El sábado en la tarde, lo que pintaba para ser un tranquilo fin de semana familiar para los asistentes del MoMA, se convirtió en una escena de terror tras ataque en la recepción del museo.
Los oficiales del recinto y la policía de Nueva York, reportaron un violento ataque a dos trabajadores del museo de arte contemporáneo. Estos trabajadores estaban en la recepción en su rutina laboral: recibiendo visitantes, vendiendo boletos y resolviendo dudas, cuando repentinamente un agresor entro a su espacio y atacó a los inocentes. El atacante ha sido captado en las cámaras del MoMA y fue identificado como Gary Cabana, un hombre de 60 que ya ha tenido problemas con la institución.
Según los reportajes del New York Post, Cabana era fiel visitante del museo de arte contemporáneo, iba regularmente a las salas del recinto, pero en los últimos meses había tenido encuentros conflictivos con la seguridad del MoMA. De tal manera que el sábado exploto y ataco a miembros del equipo.
Aunque la policía ha identificado a Cabana como sujeto sospechoso, no ha sido detenido. Gary ha utilizado sus redes sociales para contar su historia, menciona su razón para atacar a los empleados es muy simple: perdió el control tras perder su subscripción al museo. Se le informó al visitante que no se iba a renovar su estadía en el MoMA y él enloqueció. Muchos consideran que este ataque ya estaba premeditado, pues Cabana llegó armado al museo.
Cabana se comunicó con el NY Post, explicando el motivo de su ataque, las previas advertencias del museo y el elemento final que lo hizo accionar de esta manera.
La “carta” de seguridad me agarro completamente por sorpresa, sin ninguna reunión o consulta para explicar mi situación de salud mental y lo importante que es el CINE para mi vida…Cuando me dijeron que no podía subir a ver STARRY STARYY NIGHT EVER AGAIN perdí la cabeza
Gary Cabana, the new york post
Las víctimas, una mujer y un hombre de 24 años, fueron transportadas al hospital más cercano de la ciudad. Están en recuperación y se informa que sus heridas no son críticas.
Gary no se esconde de los medios, hablando abiertamente de su crimen y publicando en redes sociales sus razonamientos, criticas y bromas sobre el asunto. Recientemente, le menciona al NY Post su plan de retiro para no ser encontrado por las autoridades: huir al resort en Florida del expresidente americano, Donald Trump.
Post a comment