Instalada el 7 de marzo de 2017, en el marco del día internacional de la mujer y un contexto político norteamericano que no favorecía a los derechos de la mujer, esta estatua se convirtió en un símbolo  de resistencia y valor para las mujeres de Norteamérica. La imagen de una niña posicionándose enfrente del toro de Wallstreet, en una de las calles más importantes del estado, donde ocurren todos o mayoría de los negocios estadounidenses. 

Esta figura fue creada por Kristen Visbal como una comisión de la Corporación State Street, tras el término de su contrato en Nueva York, la escultura se ve perdida en búsqueda de un nuevo territorio y Kristen está en discusiones legales para reclamar los derechos de su creación, para Visbal le parece esencial quedarse la propiedad intelectual de La chica sin miedo.

El contrato que se celebra en conjunto con la corporación americana y la alcaldía de la ciudad de Nueva York estipulan que los derechos creativos son de la artista y no de quién haya hecho la comisión. Pero los abogados de State Street mantienen que hay cláusulas que limitan la autoría de la escultura a Visbal, cuando se le pagó por la pieza se adquirieron también los derechos. 

Visbal quiere reclamar su pieza, pues quiere reproducir la imagen de la niña valiente y vender estas réplicas como miniaturas, pósters, y más mercancía. Como lo hizo la artista el día de la mujer en 2019 donde realizo miniaturas de su escultura y las llevo a la marcha anual. Desde esa instancia State Street y Visbal se han peleado por la escultura. 

“Tengo un problema con que la obra no sea utilizada ampliamente por un grupo diverso de organizaciones que están alineadas con los ideales que la sustentan

dice kristen Visbal durante una conferencia de prensa.

¿Dónde se situará la niña sin miedo? 

Las conversaciones legales apuntan a que la escultura se quede otros tres años en donde esta, mientras se resuelve el otro tema legal, sin embargo, si en algo están de acuerdo ambas partes implicadas en el contrato es que este símbolo de lucha debe de quedarse en Nueva York y debe de exponerse en las calles más importantes de la ciudad de Manhattan. 

La decisión procederá el 14 de diciembre en una reunión con la Comisión de Preservación de Lugares de Interés Histórico.