El martes 7 de marzo, el británico recibió la más alta distinción en este campo. Ha tenido especial éxito a la hora de dar una segunda vida a edificios venerables.

El Premio Pritzker 2023, máxima distinción en el mundo de la arquitectura (dotación de 100,000 dólares), fue concedido el martes al arquitecto británico David Chipperfield, de 69 años. Conocido por sus inteligentes intervenciones en el patrimonio existente, no ha firmado ningún edificio notable en los últimos años, aparte del Museo del Río y del Remo cerca de Oxford, la colección Jumex en México y el pabellón para la Copa América en Valencia (España).

Entre sus últimos proyectos figura la construcción de una galería que unirá el Neues Museum y el Museo de Pérgamo en la Isla de los Museos de Berlín. David Chipperfield se declaró abrumado por la emoción de recibir “este extraordinario honor”.

Me tomo este premio como un estímulo para seguir dirigiendo mi atención no sólo a la sustancia de la arquitectura y su significado, sino también a la contribución que podemos hacer como arquitectos para abordar los retos existenciales del cambio climático y la desigualdad social, añadió, citado en el mismo comunicado. Sabemos que como arquitectos podemos desempeñar un papel mayor y más comprometido en la creación de un mundo que no sólo sea más bello, sino también más justo y sostenible, prosiguió.

El arquitecto británico sucede a Diébédo Francis Kéré, galardonado en 2022. Este nativo de Gando, en Burkina Faso, nacionalizado alemán, siempre ha tenido una sola idea en mente: implicar a la comunidad en sus proyectos y construir con lo local, fomentando la reutilización y el reciclaje.