Muere Alejandro Luna, emblema del teatro mexicano y padre de Diego Luna


Fue un reconocido escenógrafo no sólo en México, sino también en países europeos y asiáticos donde trabajó para óperas y obras de teatro. Alejandro Luna fue, sin duda, uno de los estandartes del teatro en el siglo XX.


Alejandro Luna falleció la mañana del martes 13 de diciembre, de acuerdo con información de la Asociación Nacional de Actores, que publicó un mensaje con la noticia:

Lamentamos el fallecimiento del Maestro Alejandro Luna, figura esencial en la historia del Teatro Mexicano. Escenógrafo, Iluminador, Arquitecto y maestro de múltiples generaciones de teatreros. Nuestras condolencias a familiares, colegas y amigos. Descanse en Paz.

Ganó el Premio Nacional de Ciencias y Artes en 2001 por sus aportaciones no sólo a la escenografía, sino también a la arquitectura, ya que a lo largo de su carrera rediseñó muchos foros que corrigió panópticos y panorámicos.

Su hijo Diego Luna es actualmente uno de los actores mexicanos con mayor proyección internacional y acaba de ser nominado a los Globos de Oro por su papel en Andor.

Luna siempre ha reconocido a su padre como la mayor influencia que tuvo a la hora de dedicarse al mundo de la interpretación ya que de niño, Alejandro Luna solía llevarle a los teatros donde trabajaba. Y mientras su padre era el arquitecto y escenógrafo, Diego jugaba entre bambalinas.

Luna Ledesma nació el 1 de diciembre de 1939 en la Ciudad de México; en el diseño escenográfico se asumió siempre como autodidacta. Por su relación con movimientos, creadores, la calidad de sus diseños y su interés por el teatro como arte, se convirtió en un punto de referencia para entender el desarrollo del espacio escénico. Además, su influencia en la formación de jóvenes escenógrafos lo ubican como una referencia para el movimiento escenográfico contemporáneo en México.

Trayectoria y homenaje

Diseñó la producción de los largometrajes Frida/Naturaleza viva (1986), de Paul Leduc; Cabeza de Vaca (1991), de Nicolás Echevarría; Santa sangre (1989), de Alejandro Jodorowski, y La tarea prohibida (1992), de Jaime Humberto Hermosillo, entre otras producciones.

Algunos de los premios y reconocimientos que obtuvo a lo largo de su carrera son: la Medalla Bellas Artes (2016); Medalla Cátedra Ingmar Bergman, como reconocimiento de su contribución al quehacer fílmico y teatral en 2016 y Premio de Honor de la Asociación de Críticos y Cronistas Teatrales, ambos otorgados en 2001; Jurado internacional de la Cuadrienal de Escenografía de Praga 2003; Distinguished Artist Award, otorgado por la International Society for the Performing Arts en 2004; miembro de número de la Academia de Artes en 2007, Premio Universidad Nacional 2007.

Recibió un emotivo homenaje a inicios de noviembre, cuando la CNT celebró sus 50 años de creación en el palacio de Bellas Artes de Ciudad de México. La compañía puso en escena fragmentos de 14 de sus producciones más emblemáticas y las autoridades de Cultura entregaron reconocimientos a toda una generación de creadores, entre ellos el escenógrafo mexicano. 

Entre 1964 y 2013 proyectó y asesoró la construcción de 65 teatros, entre ellos, el teatro Juan Ruiz de Alarcón y la Sala Miguel Covarrubias, para la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM); el Teatro Diana y el Centro de Artes Escénicas, recintos que se ubican en Guadalajara. Fue profesor en la Escuela Nacional de Arte Teatral del Instituto Nacional de Bellas Artes (1970-1973) y del Centro Universitario de Teatro de la UNAM (1979-1985), además de haber impartido múltiples cursos y talleres en universidades y centros de estudio sobre teatro, en el país y en el extranjero.

Ahora, después de su fallecimiento, la Secretaría de Cultura del Gobierno de México y el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL) informan que se realizará un homenaje póstumo al arquitecto el próximo viernes 16 de diciembre a las 12:00 horas.

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