Columna por: Ellie Rossenbanks

“Desde drogas, alcohol, muertes y tórridos romances. Resulta necesario entender todo este contexto para conocer la historia que acompaña a Vivienne Westwood, desde la diseñadora hasta su marca”.

¿Qué tiene que ver “Rich Girl” (Gwen Stefani) con “cheers” (Wiz Khalifa) o “Think Abouts Us” (Little Mix)? La respuesta está en la letra, todas estas canciones hacen referencia a una sola persona con una idea de revolución: Vivienne Westwood. La diseñadora a la que nadie pudo decirle que no, o que de hecho no aceptó un “no”.

La reina del punk y el new wave 

Incluso si no estamos en la Aries Season, ni hablando de 1941 o símbolos europeos, es importante buscar el momento para introducir estos temas a la conversación en cualquier momento si queremos hablar de todo lo que involucre rebeldía y oposición. 

Vivienne Isabel Swire nació en medio de la Segunda Guerra Mundial en Derbyshire, un condado en Inglaterra; se sabe que su padre se dedicaba a laborar en una fábrica de aviones y su familia era de clase media. Westwood tuvo acceso a estudios universitarios en la división de artes, especialmente de joyería, pero los abandonó al no saber “cómo una chica de clase trabajadora como ella podría meterse en el mundo del arte”, por lo que se dedicó a laborar y a dar clases en una escuela primaria mientras se seguía dedicando a fabricar su propia joyería artesanal.

Ante todo esto, Vivienne conoció a Derek Westwood, con quien se casó a los 21 años, boda en la que usó un vestido confeccionado y diseñado por ella y con él tuvo a su primogénito un año después de contraer nupcias al que nombró Ben (Benjamin).. La pareja duró alrededor de 4 años, ya que para 1967, Westwood (quien decidió conservar el apellido de casada) ya estaba viviendo con el estudiante que conoció por medio de un profesor y su escuela: Malcolm McLaren, un artista 5 años menor que la futura diseñadora, y teniendo a su segundo hijo: Joseph Corré (hijo que rechazó el apellido paterno por maltratos del mismo). 

En 1971, cuatro años después del nacimiento de su segundo hijo, la pareja decidió abrir un local de ropa que pasó por varios nombres hasta llegar a “SEX”, además de las prendas, vendían la joyería que también contaba con el nombre “Vivienne Westwood” como una marca. Los diseños comenzaron con una estética de motociclistas, prostitutas o personas rebeldes o de clase baja, clase a la que Vivienne siempre ha mostrado en sus obras.

Hablemos de Sex Pistols y McLaren

Desde drogas, alcohol, muertes y tórridos romances. Resulta necesario entender todo este contexto para conocer la historia que acompaña a Vivienne Westwood, desde la diseñadora hasta su marca.

La banda de punk en sus inicios conformada por Steve Jones (vocalista), Paul Cook (baterista) y Wally Nightingale (guitarrista) tocaba con instrumentos robados en los suburbios de Londres, pasando también su tiempo libre en cada tienda con influencias de revolución en ellas, tales como Acme Attractions, King’s Road y en ese entonces, Too Fast To Live, Too Young To Die, la última propiedad de McLaren y Westwood. 

La tienda de la pareja era un referente para todas aquellas juventudes que buscaban rebeldía, que necesitaban un lugar para despejarse, fue ahí donde se comenzaron a hacer grupos de personas con gustos o ideales en común, de aquí es donde la banda conoce a personajes que estarían en la banda tiempo después, como Sid Vicious o Mark Stewart sólo por mencionar a un par. Tiempo después, el vocalista de la banda, en ese momento llamada The Strand, buscó apoyo económico con McLaren para un lugar formal donde pudieran ensayar, logrando así convertirse en manager de la banda. 

McLaren en el inter de este despegue, viajó a Nueva York para representar a otra banda emergente de esa ciudad y a su regreso a la tienda apoyó más a The Strand para que pudieran hacer un debut de una forma correcta. La banda comenzó a tocar en pubs y su público era pequeño pero seguro: universidades y cualquier movimiento que fuera un “anti-”, renaciendo como Sex Pistols, después de haber pasado por variedad de posibles opciones. 

McLaren era el manager pero la diseñadora de los vestuarios que la banda usaba era completamente idea y creaciones de Westwood, haciendo no sólo de esta banda una idea sino un concepto visual, siendo en conjunto los creadores del punk, se dice que Sex Pistols pudieron ser la primera banda de punk que iniciara todo el movimiento en los 70’s en Inglaterra, movimiento que se extendió por todo el mundo.

Contexto histórico de los 70’s y la importancia del punk

En Inglaterra, la mayoría de la población era de clase obrera, el gobierno daba apoyos pero terminaban no siendo suficientes para toda la descendencia que estaban teniendo las familias y el crecimiento de la población. Había muchas huelgas por los pocos días que se trabajaba debido al recorte de días o de personal por el hecho de la situación económica; a todo esto, The Beatles para inicios de esta década ya había anunciado su separación y todo lo que esta banda acarreaba (romanticismo y paz) se había empezado a disolver con ellos y la euforia que provocaban comenzaba a volverse contra otro tipo de espectáculos, como los conciertos de rock que ahora estaban más llenos que otros géneros. 

Lo que podemos imaginar como un vecindario estructurado lo tenían los ingleses en 1970, sólo que sin lo perfecto de todo esto; la gente estaba delgada por la falta de comida debido al dinero y es que el contexto no era tan precario para todos pero sí había una diferenciación entre las clases sociales. 

Al ser los 70, el que trabajaba era el hombre y la que cuidaba el hogar era la mujer, esos eran considerados los valores familiares en ese entonces. No es que las. mujeres no quisieran trabajar sino que eran pocos los trabajos que se les ofrecían o las vacantes disponibles ante este sexo.

Para esta época, el ser homosexual o básicamente cualquier espectro de la comunidad estaba mal visto, aunque ya era legal tener una pareja del mismo sexo.

Todo esto, aunado al cambio de generación e ideología lograron la revolución punk, es decir, la anarquía era un tema recurrente y el “odio” o aversión a lo comercial y hegemónico de esta época se vuelve el tema central de las protestas, todo se vuelca en los looks, la estética, la cultura y por supuesto: la música.

Vivienne Westwood como madre de un movimiento 

Así como el logo que porta la marca representa el futuro y el pasado en un mismo orbe, así mismo se puede decir que es la marca y la, ahora con título nobiliario, Dama Vivienne Westwood sigue demostrando y respondiendo a las críticas que siempre se le han hecho, después de divorciarse de McLaren siguió produciendo ropa sin necesidad de la banda o su ex marido y la tienda que juntos habían creado. 

El éxito de la marca fue tanto que llegó a presentar en la Semana de París en los años 80, es decir, a una década de haber empezado; todo esto gracias a su activismo dentro y fuera de las prendas, con su constante innovación ej materiales e ideas, rompiendo la idea que se tiene de la alta costura. 

Se dice que Vivienne nunca ha encajado del todo en los grandes eventos debido a la naturaleza de su personalidad y de sus ideales, esto ya que es muy constante con sus discursos como el de la sustentabilidad, que inclusive en el funeral de su ex esposo (en su cumpleaños en 2010, es decir, el 8 de abril) sacó el tema a relucir siendo fuertemente criticada por insensible. 

No se niega la influencia que causó gracias a Sex Pistols o a la tienda en King’s Road de la que fue dueña, sin embargo, un buen argumento en contra de todos estas fuertes críticas hacia la creadora es que ambas cosas, tanto la banda como la tienda, ya no existen pero Vivienne Westwood sigue presentando en las Semanas de la Moda, revolucionando la industria a sus ochenta años y probablemente siga haciéndolo por el tiempo que quiera.