Imagen destacada: Vera Wang para VOGUE. Cortesía de VOGUE.

Columna por Ellie Rosebanks

Existe una frase con respecto a estos vestidos y es justamente: “Tú te ajustas a un Vera, el Vera no se ajusta a ti”


Para cerrar nuestra cancer season (julio 22) hablaremos de uno de los mitos más grandes de la moda y de nuestra canceriana favorita: Vera Wang. Esta diseñadora es de las más conocidas y es un must a la hora de hablar de vestidos de novia, sin embargo, estos vestidos tienen una “maldición”, o eso es lo que se dice por todas las anécdotas que persiguen a las novias que han usado estos diseños tan populares.

El ascenso de una leyenda

Vera Ellen Wang es una neoyorkina nacida en 1949, tiene ascendencia china por parte de su familia. Podría decirse que es una nepobaby (hija del nepotismo), ya que su familia era muy adinerada, por lo que asistió a las escuelas más importantes de Manhattan, además de recibirse en Historia del Arte de la Universidad de Sarah Lawrence.

Antes de entrar al mundo de la moda, quiso entrar al mundo del deporte en el rubro de patinaje artístico. Wang desertó de este sueño cuando no logró entrar al equipo olímpico de Estados Unidos y optó por el camino de su madre, quien era una persona influyente en el mundo de la moda y solía llevarla a ciertos eventos de moda en París, por ello, decidió seguir ese camino que parecía trazado para ella.

Un grupo de personas junto a una mujer

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Anna Wintour (editora en jefe de VOGUE) y Vera Wang. Cortesía de El Periódico.

Primero fue editora de VOGUE debido a sus prácticas, duró en ese puesto 16 años hasta que fue rechazada como editora en jefe. Pasó también por la prestigiosa marca Ralph Lauren como directora de diseño. Después de un tiempo, en 1990, decidió abrir su marca de vestidos nupciales y ciertas especialidades como trajes para patinadoras importantes. 

Cabe destacar que también trabajó en una tienda de Yves Saint Laurent, tiene una marca de perfumes y una sección en su marca de ready-to-wear.

De aquí podemos decir que lo demás es historia; sabemos que si de vestidos de ensueño se trata, un Vera Wang siempre será una opción.

La importancia del vestido

En el mundo nupcial hay demasiados mitos y tradiciones, como el que el vestido de novia deba ser, exactamente blanco, no un color hueso ni derivados, debe ser un blanco puro para representar la “pureza” de quien lo porta. Otro mito muy popular es que no se debe o puede usar perlas en el casamiento porque esto traerá tristeza y desgracia al matrimonio, pero contrario a esta, existe otra que sigue muy vigente y es el llevar algo azul, algo prestado o algo viejo para atraer la buena suerte y tener un matrimonio feliz; estas son aunadas a las tradicionales: la soltera que toma el ramo, que la pareja no debe verse antes de casarse y por supuesto, que la novia es la única que debe vestir de blanco.

Esto es algo muy interesante ya que, se ponen todas las expectativas en el vestido, programas como “Dile Sí al Vestido”, “Encontré el Vestido”, “Vestido de Novia” refuerzan esta idea de que la novia debe llorar o sentirse conectada con el vestido. Fuera de que esto puede o no ser cierto, es real que los vestidos de novia tienen demasiado peso en la boda, inclusive más que la persona que lo porta.

Mujer con vestido blanco

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Colección de novia: Otoño 2022. Cortesía de Matrimonio.

La maldición de las celebrities y el inicio de un mito

Existe una frase con respecto a estos vestidos y es justamente: “Tú te ajustas a un Vera, el Vera no se ajusta a ti”, si es tóxica o no es otro tema, pero en el mundo de la moda, esto suele ser así, las personas encargadas de diseñar normalmente poseen “musas”, tal como Karl Lagerfeld con Lily-Rose Depp o Donatella Versace con las hermanas Hadid, entonces los diseños ya están pensados para un tipo de cuerpos y de ahí se hacen los ajustes de las tallas. Sin embargo, al ser una celebridad y poseer millones de dólares. Puedes darte el lujo de elegir quién y cómo hará tu vestido de novia, o si será más de uno, como en algunos casos de los que hablaremos.

El mito de Vera Wang empieza desde que varias celebridades optaron por diseños de Wang en su boda y sus matrimonios terminaron en divorcios, dramas o peleas públicas, e incluso, infidelidades. He aquí diez de los ejemplos más usados para “comprobar” esta teoría:

  1. Mariah Carey y Tommy Mottola

No se sabe a ciencia cierta si esta fue la primera pareja que “fracasó” usando un vestido de Wang, sin embargo, fue el inicio de un gran mito, ya que la estrella de pop y el manager de la artista se casaron en 1993, tres años después de que Vera abriera su marca. Duraron cinco años casados, sin embargo, cuando se divorciaron, ella denunció todos los abusos de poder que tenía contra ella, desde la edad que cada uno tenía (23 y 44 respectivamente) y la protección y vigilancia bajo la que se encontraba Carey.

Un grupo de personas con traje de color negro

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Mariah en su boda junto a su esposo: Tommy. Cortesía de Nueva Mujer.
  1. Jennifer Aniston y Brad Pitt
Jennifer Aniston en su vestido Ver Wang, con su esposo: Brad Pitt. Cortesía de The Mirror.

Una de las bodas y también de los divorcios más mediáticos que existieron en los dos mil fue el de esta pareja, pues ambos eran los íconos de la época y la pareja más hegemónica y con carisma que se podía ver en los medios, no obstante, también se vieron envueltos en un escándalo, y es que cuando Brad estaba grabando una película con Angelina Jolie, surgieron rumores de una infidelidad que terminó por separar a la pareja después de estar casados por cinco años desde inicios del siglo.

  1. Jessica Simpson y Nick Lachey

Este par se casó en 2002, también se les consideró una pareja icónica, tanto que realizaron un reality show acerca de su matrimonio, en él se veía esa montaña rusa que era su matrimonio, además de ventilar temas privados; concluyeron su matrimonio en el 2006, es decir, cuatro años después por, en palabras de ambos, darse cuenta de que no se conocían lo suficiente como creyeron hacerlo hasta que se mudaron, además de ser personas completamente diferentes, según productores y la misma Jessica.

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Vídeo de bodas de Jessica Simpson con su esposo. Cortesía de soJO 104.9
  1. Jennifer Lopez y Marc Anthony
Un grupo de personas haciendo gestos con la mano en la cabeza

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Jennifer Lopez en su vestido de novia junto al cantante y ex esposo de la artista. Cortesía de Pinterest.

El matrimonio de estos dos estadounidenses con ascendencia latina comenzó bastante bien y su unión que se realizó de forma privada duró diez años, es decir, estuvieron juntos desde el 2005 y concluyeron su unión en 2015. Esta pareja de músicos (y actriz) hispánicos realizaron varias canciones en dueto y performances en conciertos de ambos cantantes; aunque todo tiene un final, y el motivo de este fue, de acuerdo con el libro “True Love” de J Lo: la decadencia de su matrimonio y los ataques de pánico que sufría en consecuencia de el miedo o estrés que la cantante y actriz estaba viviendo.

  1. Jennifer Garner y Ben Affleck
Un par de personas en una playa

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Foto de la boda íntima de Jennifer Garner con su ex-esposo: Ben Affleck. Contesía de OK Magazine

Ambos actores se conocieron en en el rodaje de “Pearl Harbor” en el 2000, sin embargo, la tensión entre ellos empezó en el 2002, para estas fechas, Ben Affleck estaba con una mujer homónima: Jennifer López, ambos siendo una de las parejas más importantes de estas fechas y Garner estaba casada con Scott Foley, Affleck y Lopez terminaron en 2004 después de haber estado comprometidos y un año antes Garney y Foley se habían divorciado. En el 2005, Ben y Garner empezaron su romance y se casaron ese mismo año en una ceremonia privada, tuvieron dos hijas y un hijo, y su matrimonio fue uno de los más duraderos de Hollywood, ya que fue hasta el 2015 que anunciaron su separación. Affleck declaró que ya no estaban en la misma sintonía y que se había quedado únicamente en esa unión por sus descendientes.

  1. Avril Lavigne y Deryck Whibley
Avril Lavigne en su boda con el vocalista de Sum-41. Cortesía de AvrilPix.com

La ícono del pop-rock y el vocalista de Sum-41 contrajeron nupcias en el 2006, un año después de conocerse, inclusive el cantante le dedicó una canción que ha sido muy popular en la discografía de la banda y lleva por nombre “With Me”. Estos canadienses duraron 3 años casados, el anuncio de la separación se dio en el MySpace del artista. Whibley declaró que los problemas que llevaron a la ruptura fue la preocupación de su, entonces, esposa, por la forma en la que celebraba después de los conciertos, cosa que coincide con la declaración de Avril, quien dice que fue una relación muy tormentosa por el abuso de drogas y alcohol de su cónyuge. 

  1. Kim Kardashian y Kris Humphries

Este mito se hizo aún más grande con este matrimonio, ya que en su boda la socialité usó tres vestidos Vera Wang y su matrimonio duró 72 días, es decir, poco más de dos meses. La empresaria y el basquetbolista se conocieron y empezaron su relación en el 2010 y se casaron un año después. Kim reveló que, en realidad, ella no quería casarse y que todo fue por presión del reality show de la familia (Keeping Up With The Kardashians), mientras que Kris acusa a la familia de usarlo sólo por popularidad y rating en el show, ya que su boda fue televisada y vendida a E!, la cadena televisiva que llevaba el programa de la familia. 

Boda de Kim Kardashian con el basquetbolista Kris. Cortesía de POPSUGAR.
  1. Kaley Cuoco y Ryan Sweeting
Un grupo de personas en una boda

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Kaley en su vestido rosa con su esposo Ryan al lado. Cortesía de Arabia Weddings.

La actriz de “The Big Bang Theory” y el tenista se casaron en el 2013, ella eligió un vestido rosa de la marca; sin embargo, llevaban 6 meses de haber comenzado su relación cuando se comprometieron y duraron 3 años comprometidos. Para esto, la actriz solicitó el divorcio a finales del 2015 y concluyeron su matrimonio en el 2016. Ambos declararon a People que no estaban en la misma sintonía y que sus planes no eran compatibles, es decir, sus sueños eran un impedimento porque querían tomar rumbos diferentes.

  1. Khloé Kardashian y Lamar Odom
Khloé en su boda con su ex-esposo Lamar. Cortesía de Us Weekly.

Si hay algo que caracteriza a las Kardashian, aparte de sus frases icónicas salidas de su reality y sus grandes emprendimientos, es el drama en sus relaciones, por lo que Khloé no fue la excepción. La Kardashian menor se casó con el basquetbolista en el 2016 pocos meses después de conocerlo y al igual que la boda de su hermana mayor, esta fue televisada. El romance tuvo un fin en el 2019 por las infidelidades y adicciones por parte de Odom.

  1. Hilary Duff y Mike Comrie

La icónica actriz que dio vida a Lizzie McGuire y el jugador de hockey canadiense se casaron en el 2016, después de 7 años de ser pareja, sin embargo, el matrimonio duró muy poco, ya que fueron 4 años los que estuvieron juntos como un matrimonio, del que salió un descendiente. La abogada de la actriz infantil declaró que se divorciaban por diferencias irreconciliables, además Hilary explicó “Sólo estamos tratando de disfrutar nuestras vidas y tratando de entender qué es lo que nos hace felices”

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Hilary Duff en su boda con Mike. Cortesía de Arabia Weddings.

Hay aún más casos de famosas que se han divorciado y usado vestidos de Vera, sin embargo, termina siendo un mito, ya que hay otros casos de éxito con estos vestidos, por ejemplo: Victoria Beckham, la ex-spice girl que lleva casada 23 años con el futbolista David Beckham.

Recientemente, Paris Hilton usó un diseño en su boda de la diseñadora estadounidense, al igual que Ariana Grande, y la gente espera que la maldición no las persiga. Sabemos que es un mito y así debemos tomarlo, pero ¿qué tan cierto o falso puede ser con tantas celebridades divorciadas? Sea verdad o sea mentira, no podemos negar el gran talento y los espectaculares diseños de Wang, y en lo personal, creo que si fuera cierto el mito, aún usaría un vestido de ella porque siguen siendo vestidos de ensueño.

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