Pareja inglesa ha decidido borrar el mural de Banksy en su propiedad, costando 200,000 dólares en total
“Somos gente normal, así que nos gustaría venderla y recuperar algo con ella”.
Para quienes trabajan en el mundo del arte, sería un sueño hecho realidad descubrir que eres el orgulloso propietario de una flamante obra creada por el escurridizo Banksy. Sin embargo, una pareja británica vive “una pesadilla” desde que Banksy pintó un pelícano de casi seis metros en el lateral de su casa de Suffolk, según informa el diario The Sun.
Garry y Gokean Coutts sufren el acoso de los vándalos desde que Banksy pintó el enorme pato en su casa en 2021, y se ven obligados a pagar la seguridad y el mantenimiento del ave, lo que les costaría unos 50.000 dólares al año, o mudarse. En caso contrario, podrían hacer retirar el mural, lo que podría costar hasta 200.000 dólares en total.
El Sr. Coutts declaró en una entrevista con el Times que, aunque al principio fue sorprendente, luego ha resultado ser realmente estresante. Puede que Banksy no sea consciente de las repercusiones imprevistas para los propietarios. Volveríamos atrás en el tiempo si pudiéramos.
A lo largo de los años, los Coutts se han encontrado con varios problemas: gamberros que han intentado pintar encima del mural, ladrones que han robado partes pintadas para venderlas en Facebook, fisuras en la pared y miembros del consejo municipal. Tras el robo, se vieron obligados a pagar a un guardia de seguridad para que vigilara el mural por la noche.
El mural, de 22 toneladas, debe ser retirado, según los Coutts, que argumentan que es la única opción. Esta ingente tarea se llevó a cabo a lo largo de un mes e implicó “reforzarlo con 12 capas de resina, fibra de vidrio y cinco toneladas de acero y utilizar una grúa de 12 metros para llevárselo”.
Los Coutts pretenden recuperar los 250.000 dólares de coste vendiendo la enorme pieza. El Sr. Coutts declaró al Sun: “Somos gente normal, así que nos gustaría venderla y recuperar algo con ella”.
Una obra de arte de Banksy de una joven utilizando un neumático de bicicleta como hula hoop fue retirada de una pared de ladrillo en Nottingham, Inglaterra, y vendida a las Brandler Galleries de Brentwood, Inglaterra, por seis cifras en 2021.
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